miércoles, 13 de marzo de 2013

Qué irónico.

Supongo que si mi yo de 13 años pudiera conocerme se reiría un poquito de mí; he destrozado en tantas partes mi coraza que le parecería un poco tonta, y hasta sentimental. Estoy tan lejos y tan cerca de ella que casi puedo ver su cara tornándose en una semi(casi)sonrisa un poco irónica, pensando 'Nunca seré esa'. Yo tendría que hablarme mirándome muy al fondo de mis ojos para que yo me escuchase bien 'Ya verás, Irene, que los caminos son inescrutables, y que acabarás despedazada cada día a las 5 de la mañana, a veces por una simple canción. Pero no te preocupes, lo disfrutarás increíblemente.' Y sé que me asustaría, y ese miedo sería maravilloso: el miedo a lo inescrutable de mi propio porvenir. 
Si pudiera conocer a mi yo de los 69 años también me reiría de mí, me apuesto el esófago.

No hay comentarios:

Publicar un comentario